jueves, 8 de octubre de 2020

Los Últimos Días de Ricaurte....Parte 2


 

Los Últimos Días de Ricaurte

Parte 2

 

“A veces una chispa de fuego deslumbra como el sol”


Eduardo Blanco

 

    El amanecer del 25 de Marzo de 1814 comenzó el avance de las tropas de Boves hacia la hacienda de Bolívar para apoderarse del ingenio donde el asturiano tenía información del poderoso parque de armas que poseería el Libertador.

    Un aproximado de 20 mil combatientes se acerca desde Villa de Cura, Boves le grita a sus hombres:

    Mis valientes fieras le llego la hora al caraqueñito. Solo les pido que una vez que lo capturen no lo maten….que yo mismo me encargare de ser su juez y su verdugo—,remata el león del llano.

    Una vez avanzado el día y conforme comenzaba el enfrentamiento en las afueras de la hacienda, Bolívar organiza las defensas de sus últimas líneas ya que la sangre corre alrededor del sitio de San Mateo bajo la espada de Boves, iluminando sus pasos cual tea funeraria.

    El número de sus contrarios se acrecienta: los muertos de la legión del demonio parecen que resucitan para seguir luchando. Allí, en torno de Bolívar, combaten Lino Clemente, los Montilla, Florencio Palacio, Ricaurte, Maza, Soublette, Muñoz Tébar y  Martin Tovar. El parque del ejército, situado en la casa alta del Ingenio, fué confiado á la custodia del intrépido capitán Ricaurte,

    Bolívar le ordena a Ricaurte:

    Capitán…. usted se encargara del resguardo del parque mientras  nosotros nos replegaremos por las dos alas de la hacienda para que el ingenio no caiga en manos de Boves.

    Ricaurte le exclamaComo usted ordene mi General.

    El neogranadino se lleva consigo a 50 soldados hacia el almacén de armas. De pronto uno de los soldados de apellido Farfán que acompañaba a Ricaurte, se detiene en medio de la marcha y le manifiesta:

    Mi capitán, siento miedo, son numerosos los enemigos pienso mucho en mi familia, no sé qué será de ellos.

    Ricaurte se detiene y se acerca al soldado. Le coloca las manos en los dos hombros y con fuerte tono de voz le replico:

    Cabo Farfán recuerde que estamos en una guerra para defender a nuestras familias. Si usted lo desea puede abandonar las filas….pero eso si…no se lamente después cuando las hordas de Boves se traguen el poco aire de libertad que le queda.

    El cabo empuñando su bayoneta exclama:

    —Tiene usted razón mi capitán….seguiré en la lucha y a sus órdenes.

    En el otro lado del campo de batalla se encontraba Boves, sobre su caballo Urogallo. En su mano derecha sujetaba una lanza bañada en sangre mientras conversaba con Rosete:

    Nunca había estado tan cerca de tener al Libertador en mis manosluego ordena—sigan avanzando. Los voy a premiar con todo el botín que tiene esa hacienda.

    Luego de horas de feroz combate, Bolívar ordena a sus tropas abandonar la hacienda en dirección este ya que todas las defensas fueron diezmadas.

    Al poco rato, el Libertador, se acerca al parque donde estaba el Capitán Ricaurte:

    Capitán, si usted ve que no puede resistir  abandone el parque y diríjase al calvario

    Mi general—, manifiesta Ricaurtepero el parque será tomado por Boves y tendrán poder de fuego muy superior—, luego de observar al cabo Farfán caído en combate le declaró a Bolívarme quedare hasta las últimas consecuencias.

    Lo necesito vivo capitán muerto no me sirve—,advirtió Bolívar.

    Ricaurte con una mirada de serenidad sugirió:

  Verá mi General, le aseguro que yo muerto defendiendo el ingenio le temerán más a usted.

    Bolívar, al escuchar lo que dijo Ricaurte, le respondió:

    Hombres como usted, no nacen todos los días. Le esperare en el sitio indicado. Que dios y la virgen lo cubran de gloria.           

    Boves desde una colina ordena dirigirse al ingenio. Las ultimas defensas de Ricaurte salen despavoridas, sin embargo dentro de la quinta, se encontraba Matea junto con otra esclava de nombre Petrona. Ellas, estaban en la cocina. Ricaurte al revisar la casa para cerciorarse que no había más nadie se encuentra a las dos esclavas.

    Matea salga de aquí inmediatamente—, le grita el capitán.

    Fue entonces cuando le solicita a Petrona y un pedazo de tizón al rojo vivo. Matea al ver lo raro de la petición le interroga:

    Niño Ricaurte por el amor de dios ¿qué va  hacer usted con ese tizón?

    Matea ahora ya entendí aquel sueño que le comente ayer en la noche, no tengo otra opción tengo que destruir el parque. Ahora salga de aquí.

    Matea sale corriendo con Petrona y se dirigen al calvario en un punto alejado de la hacienda.

    Las hordas de Boves entran y saquean el lugar, pasando con sus cuchillos la garganta de algunos heridos que no pudieron salir.

    Ricaurte al llegar al parque ordena la retirada de sus últimos soldados.Vamos salgan de aquí. —, entra y observa los barriles de pólvora, balas y municiones que allí se encontraban.

    Francisco Tomas Morales, por órdenes de Boves, sería el encargado de asaltar el trapiche.

    —Que cosas—, comenta Morales—, nunca pensé que entraría a esta hacienda, el botín más grandioso que hemos tenido. Vamos!! tomen el ingenio y maten a Ricaurte.

   Como Chacales furiosos, los realistas rodean el ingenio. De pronto, por la puerta principal, aparece Antonio Ricaurte con su casaca azul, su pantalón rojo y sus condecoraciones ganadas en las batallas de Taguanes, Niquitao, los Horcones durante la campaña admirable.

    Un sargento realista de apellido Zuloaga con un grupo de soldados intenta ingresar al patio cercano al ingenio. Ricaurte arroja el tizón dentro del parque y les grita a sus verdugos.

    La muerte esperando a la muerte.

    Una explosión exorbitante estremece el valle por completo. La onda expansiva aniquila a más de 100 realistas. Boves espantado grita:

   Carajo ¿que vaina fue esa?..Yo les dije que asaltaran la hacienda no que la destruyan.

    La explosión estremeció todo el pueblo de San Mateo. Francisco Tomas Morales se salvo de la muerte ya que estaba escondido detrás de una pared que contuvo la onda. Viendo que su caballo cayó muerto. Espantado por la escena dantesca salió corriendo hacia la posición donde estaba Boves:

    José Tomas, Ricaurte se inmolo en el parque y acabo con la mitad de nuestros hombres. Hay que salir de aquí antes de que llegue Santiago Mariño y Bolívar reorganicen sus tropas.

    Boves con una mirada de odio y de ira le dice al asustado Morales.

   Se salvo el caraqueñito. No importa, de igual manera llevaremos el terror a la capital. Ya no tienen armas. Morales…recoja lo que quedo y salgamos de aquí.

    Horas mas tarde, Bolívar se acerca al sitio del ingenio y observa con tristeza la montaña de muertos y el almacén destruido por completo...

    El Libertador exclama:

    —Ricaurte se hizo átomos. 

    Una ventisca levanto una polvareda llevándola al firmamento donde horas antes estaba el Capitán observando las constelaciones.

    Matea llora desconsolada y recoge del suelo el escapulario de la Virgen del Carmen, llena de polvo, que le había entregado al valeroso neogranadino. La estampa, increíblemente estaba intacta:

      Nos veremos algún día mi niño Ricaurte.



Epilogo

    No se tiene registro alguno, durante las guerras de independencia de este continente, de un sacrificio tan enorme como la de Antonio Ricaurte, aunque, la historia de este episodio ha tenido mucha polémica. En el año de 1828 un oficial francés de nombre Luis Perú de la Croix, en el Diario de Bucaramanga, pone en Boca del Libertador que Ricaurte no murió como se creía si no de un balazo y un lanzazo. No obstante existen muchos testigos de esa hazaña como la Negra Matea, el General José Trinidad Moran, el secretario de Guerra Antonio Muñoz Tebar, y el mismo realista Francisco Tomas Morales.

    La narración de la escena del tizón que tomo el Capitán así como el nombre de la otra esclava (Petrona) fue tomado de una entrevista realizada a la Negra Matea en el año 1883 por el periodista Colombiano Manuel Briceño. (https://steemit.com/spanish/@franzo/entrevista-a-matea-bolivar-la-negra-matea-la-aya-del-libertador-simon-bolivar) 

            Hoy en día y luego de ver como se encuentra Venezuela, con una crisis sin precedentes, está más firme esa profecía de Matea…"Seguimos arrastrando esas animas en pena. De aquellos muertos como Boves, Morales, Zuazola, Ezequiel Zamora, Cirpiano Castro, etc que están en constante involución que no permiten que Venezuela cierre ese círculo trágico de revoluciones populistas junto con caudillismo salvaje, corrupto e inhumano de nuestros políticos que son los verdaderos enemigos de esta sociedad venezolana”.

            ¿Maldición o Karma?.. Jamás se sabrá.


 Autor: FG

Hora: 13:40 pm


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